En memoria de este niño paquistaní que alzó la voz contra la explotación de los más débiles se celebra este sábado en todo el mundo el día mundial contra la esclavitud infantil.
Tenía apenas cuatro años cuando su padre a cambio de un préstamo para pagar la boda de su hijo mayor decidió entregar al pequeño Iqbal al propietario de una fábrica de alfombras. Así empezó a trabajar 12 horas diarias para saldar la deuda familiar, pero con el paso del tiempo la deuda no sólo no disminuía sino que aumentaba con los intereses y con los nuevos préstamos que pedía su padre.
En 1992, cinco años después de que comenzara su particular infierno, Iqbal conoció a Ehsan Khan, un activista que luchaba por acabar con las condiciones de esclavitud en el trabajo. Siguiendo su ejemplo, el ya no tan pequeño paquistaní comenzó a denunciar las deplorables condiciones laborales en las que otros muchos niños como él trabajaban en los telares de alfombras, convirtiéndose en un héroe para ellos.
Sin embargo, su activismo empezó a ser pronto un estorbo para los empresarios que se lucraban con el trabajo infantil y un 16 de abril de 1995 su voz se apagó para siempre tras ser disparado mientras montaba tranquilamente en bicicleta.
Sus asesinos (la mafia de las alfombras fue responsabilizada del crimen) acabaron con su vida pero no con su legado y Iqbal continúa siendo hoy día un símbolo de la lucha contra la explotación infantil.
Lamentablemente, todavía quedan en el mundo muchos pequeños Iqbal, sobre todo, en regiones deprimidas de Asia, África y América Latina.
Jornadas maratonianas de hasta 15 horas
Según los últimos datos publicados por Unicef este mismo mes, 158 millones de niños y niñas de entre 5 y 14 años trabajan cada día en jornadas maratonianas de hasta 15 horas diarias en las que apenas ven la luz del sol, expuestos a situaciones de explotación y maltrato. Una cifra algo inferior a la manejada por la Oficina Internacional del Trabajo (OIT) en su último informe , fechado en 2010, que habla de 215 millones de niños.
Unos datos que no comparten numerosas ONG, que critican la tibieza de Unicef y OIT al hablar de trabajo infantil cuando en realidad, a su juicio, el término que define mejor las situaciones que viven muchos de estos pequeños es el de esclavitud. Así hablan de 400 niños esclavos y recuerdan como muchos son torturados, otros sufren deformaciones o dejan de crecer por las duras condiciones en las que viven diariamente o se convierten en empleadas domésticas que valen menos que cualquier animal o son prostituidas o casadas a la fuerza. Tampoco olvidan a los menores soldados o aquellos sometidos a trabajos forzados en las minas o en la agricultura o a niños como Iqbal que trabajan para saldar las deudas de sus progenitores.
En España la situación tampoco es idílica. Como recuerda Save the Children, la trata es la principal forma de esclavitud infantil en nuestro país. “España es un país de tránsito y destino de niños, niñas y adolescentes víctimas de trata con fines de explotación laboral y explotación sexual”, explica Yolanda Román, responsable de Incidencia Política de esta organización, que añade: “Entre un 40 y un 60% de los dos millones y medio de personas víctimas de la trata son niños y niñas”.
Han pasado 16 años desde silenciaron la voz del paquistaní Iqbal, pero su recuerdo sigue todavía muy vivo.
Poema de Ángel Reyes Burgos
parido fuiste con más dolor, con más pena
aquella mujer triste que acunó la simiente
te trajo a esta tierra.
Todo el polvo que pisar podía tu sombra
fue tu cuna primera…
Eres niño y no conoces la sonrisa de los que no han crecido.
Eres hombre y el sol no te divisa entre la hierba.
Trabajo, el pan único de tus días…
Sudor, el agua de tu boca..Rabia, alfombra, sangre…
Pero sueños también en el látigo ,
en la pena, en el hambre.
Pecho infantil que cobijas un existir todo penas,
manos tiernas roídas por la herramienta
máquinas tragando brazo,fatal humo,
ensuciando caras, secando lágrimas .
Traqueteo infernal que quiebra piernas
¡Niños, tan sólo niños.ahogados de cadenas…!!.
Estas criaturas, estos tallos que para morir nacen, para ser aplastados,
-horribles manos,…
sucias nuestras manos, son arrancados a la tierra:
para el sudor y el trabajo, para abonar la opulencia.
Y, pronto, muy pronto,volver a ella, ¡¡ caer…!!…descansar al fin, bajo la misma tierra…
Tú IQBAL, nacido en la noche, forjado en el yunque de la explotación y la miseria…
naciste para dar luz, encender llama, fuego en los niños rotos…
de corazón marchito,
Una voz de silencio, una mano de paz y un corazón de Cristo lleno,
fue VIDA, fue GRITO inmenso de LIBERTAD.
Y ÉL expira, como ayer, sobre la cruz desnuda de cada niño esclavo.
¿CUÁNTO TIEMPO MÁS
NOS SEGUIREMOS LAVANDO LAS MANOS?
…Nayra..
Nota.-
Iqbal Masih: niño paquistaní, mártir por luchar contra la esclavitud infantil. Iqbal,
mártir a los 12 años, asesinado el 16 de Abril de 1995, Pascua de Resurrección,
por la mafia de la tapicería.
Le amenazaron de muerte y libre y conscientemente decidió entregar su vida.
Recibió un premio en Estocolmo y Boston.
Iqbal Masih, fue vendido por sus padres y esclavizado a los 4 años
“Mi sueño es acabar con el trabajo infantil para todos los niños del mundo”